Eres un experimentado conductor de trenes de pasajeros. Vas solo en la cabina:
A) Vas siguiendo el protocolo de conducción mentalmente
B) Vas siguiendo el protocolo de conducción en voz alta
Solución
Cuando realizamos una tarea muchas veces la acabamos interiorizando y haciéndola de modo automático. Esto es muy bueno para nuestra productividad, ya que nos permite realizar multitareas (por ejemplo, hacer X repeticiones de un ejercicio mientras oímos un podcast). Pero cuanto más automática se vuelve una acción más posibilidades hay de que cometamos un error, y eso en tareas delicadas tiene que evitarse.
Un ejemplo es el sistema de trenes de Japón, donde los conductores siguen el protocolo de conducción señalando los objetos y diciendo en voz alta las instrucciones. Por ejemplo, el operador señala a una señal de tránsito y dice: “La señal está verde”, o apunta al velocímetro y dice en voz alta a qué velocidad circula el tren. Este proceso es conocido como Pointing-and-Calling (señalar y nombrar), un sistema de seguridad diseñado para reducir errores, como cuenta James Clear en su libro ‘Hábitos Atómicos’: “Puede parecer un poco tonto, pero funciona increíblemente bien. El sistema de señalar y nombrar reduce los errores en un 85% y evita el 30% de los accidentes”.
Con este simple truco los conductores convierten un hábito casi automático en consciente, ya que se obligan a usar la boca y los oídos además de las manos y la vista. Así hay más posibilidades de detectar problemas. Clear cuenta una anécdota que seguramente todos hemos vivido: “Mi esposa hace algo similar. Siempre que nos estamos preparando para salir de viaje, ella nombra en voz alta los artículos más esenciales de su lista de viaje. Tengo mis llaves. Tengo mi cartera. Tengo mis lentes. Tengo a mi esposo”.
Recibe nuevo contenido directamente en tu bandeja de entrada.